Bajo la leyenda "CQ Inteligencia Colaborativa", del XIX Congreso Aapresid que se lleva adelante en el Centro de Convenciones Metropolitano, de la ciudad de Rosario, del 17 al 19 de agosto. En la cita tuvo el nombre de “Agricultura Certificada” (AC), y asistieron el presidente de Aapresid, Gastón Fernández Palma y el titular de Basf, Diego López Casanello, el subdirector del programa de Agronegocios y Alimentos de la UBA, Sebastián Senesi y el gerente Corporativo de vinculación Tecnológica del Grupo Arcor, Gabriel Roya Tonetti.
Según las instituciones el proyecto que se lanzó en 2008, en el XVI Congreso de Aapresid “Quo Vadis” es un salto cualitativo porque abre un nuevo horizonte para el origen agropecuario, que trata de conjugar la línea de producir más alimento y cuidar el medio ambiente. En el panel, se debatió hacia dónde vamos en los agronegocios: ¿Cómo se alcanza la sustentabilidad de los biocombustibles en la Unión Europea? ¿Es posible armar una cadena de agregado de valor para AC? ¿Cómo fue la experiencia de los nuevos productores en campos certificados?
El presidente de la Asociación Argentina de productores en Siembra Directa (Aapresid), Gastón Fernández Palma manifestó que la nueva alianza estratégica que firmaron con Arcor y Basf “es pensar en una Agricultura Certificada y seguir con la evolución de Siembra Directa". El objetivo de Aapresid es que AC emplee el uso racional de las bioenergías, biocombustibles, el manejo integrado de los agroquímicos y pulverización, además la rotación de cultivo, es por eso que Palma aconsejó “no generar monocultivo”.
“Tenemos 96% menos erosión de suelos en el centro de Santa Fe y sur de Córdoba, 66% menos en el uso de combustibles, mayor eficiencia en el uso de agua; son algunas de los elementos que tenemos que tener en cuenta para el productor”, detalló Palma. También, repasó algunos beneficios en agricultura: “Hay mejores suelos, menos competencia por el agua dulce y con mayor calidad (menor riesgo de erosión)”.
A continuación, le tocó el turno al presidente de Basf Argentina, Paraguay y Bolivia, Diego López Casanello. “La empresa se compromete a poner a dispocisión todo el conocimiento en el desarrollo de indicadores y la metodología de medición para mejorar la puesta en prácticas de del sistema de Agricultura Certificada en Argentina, y por otra parte poner nuestro equipo para asesorar a los productores que trabajan para Arcor en la aplicación de nuestros productos”, remarcó y añadió “la Agricultura Certificada puede marcar un hito histórico, queremos motivar a productores e integrantes, la mejor manera es hablar de que estos pilares son fundamentales para hacer las cosas bien”.
Por otro lado, terminando con la disertación del panel casi a la uno de la tarde, el gerente Corporativo de vinculación Tecnológica del Grupo Arcor, Gabriel Roya Tonetti destacó que “la compañía tiene 41 fábricas de alimentos y como postura es prevalecer la sustentabilidad porque Arcor produce energía, azúcar, jarabe de maíz y molemos 800 toneladas del grano”. Además, producen las cajas de Arcor de cartón corrugado en donde utilizan el 15% y el 85% se vende a terceros. A mediano plazo, quieren certificar campos y “promover la incorporación de agricultura certificada por parte de nuestros proveedores”.
¿El productor está obteniendo un precio diferencial en su producción al certificar? El primero en contestar fue el subdirector del programa de Agronegocios y Alimentos de la UBA, Sebastián Senesi: "Lo importante es crear valor y que pueda tener un impacto en el precio pero el fin no es para que el productor pague más”, fue la única pregunta que nombraron en la sala “Intacta Pro”.
Frente a está situación el auditorio esperaba un respuesta del titular de Aapresid, entonces Dilma levantó la voz en tono calmo y contestó: “Todavia no tenemos beneficios objetivos desde la cadena pero se está trabajando en eso, sin duda es una de las preocupaciones que tiene el programa. Hay que conseguir el beneficio del productor, tal vez no se manifiesta en los mejores precios de los productos del mercado, pero sí para tener ventas en los insumos y precio, para tener posibilidades impositivas y crediticia. Obviamente está condicionado politicamente con lo que tengamos que consensuar ya que hemos hecho presentaciones en diferentes legislaturas, en la Cámara de Diputado y creemos que vamos por buen camino, por supuesto es un camino lento pero pagos diferenciales no hay”, enfatizó.
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